Presunto asesino de sargento conducía un auto robado y tenía antecedentes
Testigos afirman que rechazó arrojarle una botella plástica al uniformado. Tuvo "ánimo homicida", dijo fiscal.
Diego Gotelli C.
"Hermano, le tiré un fierro. Parece que le pegué al paco". Con esas palabras el principal sospechoso de asesinar al sargento segundo Carlos Retamal narró a un conocido la agresión que le habría propinado cuando fiscalizaba una carrera clandestina en San Antonio, lo que terminó matando al uniformado tras agonizar dos días.
El único imputado por el crimen es un joven chileno de 24 años, identificado como Jeremy Rodríguez, quien registra arrestos por hurto y lesiones. Es un fanático del mundo tuerca y solía compartir videos de carreras clandestinas en las que participaba, aunque tenía su licencia suspendida. En horas en que el policía de 41 años se debatía entre la vida y la muerte, su presunto agresor posteó un clip de la película "Rápido y Furioso" calificando como "un crack" al fallecido actor Paul Walker.
Tras ser arrestado de madrugada, ayer la Fiscalía lo formalizó por el homicidio del carabinero y arriesga una pena de cadena perpetua. En la audiencia le imputó delitos de participar en una mortal carrera clandestina, de no auxiliar a la víctima y de receptación, pues habría asistido a la competencia conduciendo un vehículo que fue robado en octubre del año pasado, el que apareció ayer abandonado tras ser modificado.
Ese auto, un Nissan V-16, fue clave para ubicar al sospechoso en el sitio del crimen. Una cámara lo captó en la zona y un testigo identificó al joven como su conductor.
De acuerdo a la indagatoria, el ataque ocurrió cuando los más de 50 vehículos convocados huían ante la presencia policial, la que a sugerencia de Retamal se estacionó a un costado de la ruta a fin de espantar a los asistentes y anotar sus patentes sin intervenir.
Pero en la huida el V-16 pasó junto a Retamal y desde su interior fue aventada una herramienta que el sospechoso usaba para cambiar las ruedas de su vehículo, según narró un conocido de Rodríguez citado por la Fiscalía. "Iba a unos 80 o 90 km/h y le lanza el fierro", contó, afirmando que la acción se registró en un video en que -afirma- se ve al imputado pedirle a su copiloto un objeto para tirarle al policía y rechazar una botella plástica que éste le ofreció, para luego ponerse a buscar él mismo el fierro utilizado.
Dicho acompañante declaró como testigo y corroboró que quien lanzó el objeto fue Rodríguez.
Cuando las pruebas apuntaban hacia él, el sospechoso fue citado a declarar. Según su defensa, interrumpió un "viaje familiar" en Rapel y concurrió voluntariamente a la PDI, pero se negó a hablar aludiendo una "conmoción emocional" tras desmayarse en el interrogatorio. En la audiencia su abogada puso en duda que existiera "dolo" en el presunto accionar del joven, lo que el fiscal Osvaldo Ossandón rebatió afirmando que actuó con "ánimo homicida".
El Juzgado de Garantía de San Antonio acogió la petición de los querellantes y dejó en prisión preventiva al imputado por representar un "peligro para la sociedad".
Desde Antofagasta el Presidente Gabriel Boric pidió una sanción "implacable" de ser declarado culpable, y garantizó "todo el respaldo" del Gobierno para Carabineros.
En la RM la ministra del Interior, Carolina Tohá, asistió al funeral de Retamal a expresar sus condolencias a la familia. Ello pese a que temprano el padre del carabinero, Juan Carlos, le pidió distancia al Gobierno, recriminándole sus posturas en las protestas sociales.
La hija del mártir, de 14 años, dijo tener esperanza en que se haga justicia y agradeció las muestras de cariño en la masiva despedida que tuvo su padre ayer en Melipilla.