"Estoy muy feliz por cumplir mi sueño y hacer que la gente tenga esa ilusión de que también pueden cumplir los de ellos"
Javiera Toro Ibarra, futbolista tocopillana, seleccionada nacional y actualmente jugadora del Sevilla, quien se encuentra en el puerto compartiendo con su gente.
Los sueños se cumplen y así lo puede decir la tocopillana Javiera Toro Ibarra, quien desde muy niña siempre anheló convertirse en una futbolista profesional. Un camino que recorrió desde su adolescencia y que ha conllevado diversos sacrificios, pero que ahora la tienen en una de las ligas más competitivas del mundo y también como integrante de la "Roja Femenina" en reiteradas oportunidades.
Ella proviene de una familia de deportistas, su abuelo Félix "Zorrita" Toro, y su padre Ibar, han jugado profesionalmente al fútbol. También su hermano Ian.
Desde pequeña ella solo soñaba con algún día seguir el camino de sus familiares, donde brillaba en torneos locales, escolares y desde el 2017 que logró llegar al profesionalismo con Palestino, posteriormente a Santiago Morning y Colo Colo.
En 2020 dio el salto internacional que esperaba, pues fue fichada por el Sevilla, club español de renombre y desde ahí su carrera no ha encontrado un límite.
"Estoy en una liga muy competitiva, en el profesionalismo ya en un cien por ciento, viviendo mi sueño y por eso que trato de hacerlo lo mejor posible, porque para mí es una gran felicidad estar viviéndolo y quiero que mucha gente más pueda ser capaz de vivir sus propios sueños y si puedo ayudar en algo, yo feliz", explicó Javiera.
También es bien recordada su participación con la Selección Nacional de Fútbol Femenino, de ese elenco histórico que logró la inédita clasificación al Mundial de Francia en 2019, también por participar en los Juegos Olímpicos de Tokio 2020.
Sueño cumplido
Durante esta semana Javiera volvió a Tocopilla para descansar junto a su familia, especialmente con su hijo Liam que tuvo cuando era una adolescente, y compartir con la comunidad.
Sostuvo encuentros con estudiantes del Liceo Politécnico y de la Escuela Pablo Neruda, que la cobijó como alumna durante muchos años. Además, ayer realizó una clínica deportiva en el Estadio Municipal Ascanio Cortés.
"Siempre hago este tipo de actividades, visitas, cuando vengo a Tocopilla, porque yo salí de aquí y quiero motivar a que los niños y niñas sientan ese apoyo y esa ilusión de que pueden llegar adonde ellos quieran llegar. Estar aquí me llena de felicidad, de recordar igual momentos que una tiene de pequeña, nuestros lugares donde jugamos, donde nos educamos, donde crecimos y volver y que estén varias personas de las que estuvieron contigo cuando eras pequeña, estoy muy feliz. También orgullosa de lo que he hecho y de sentir que la gente es feliz con lo que hago y que me desean lo mejor, así que muy agradecida. Al pasar los años mi sueño era ser futbolista y me ha gustado siempre el deporte; y eso conlleva a que la gente te vaya observando, te vaya imitando un poco lo que una está haciendo cuando las cosas se hacen bien y creo que a lo largo de mi carrera he tratado de hacer las cosas lo mejor posible y creo que es un gran mérito, así que estoy muy feliz por eso, por cumplir mi sueño y hacer que la gente también tenga esa ilusión de que también pueden cumplir los de ellos", reflexionó Javiera.
La futbolista recordó que lo más difícil de todo este proceso, antes de llegar al profesionalismo, ha sido estar lejos de la familia, de todo lo que conoce.
"Creo que para lograr cosas siempre vamos a perder un poco, pero más que nada lo difícil es estar lejos de la familia, dejar amigos, dejar lugares donde tu creciste por cumplir sueños, pero cuando logras algo, ves a esa gente, vas a esos lugares y la gente te lo retribuye así como me lo hacen a mí en Tocopilla. Estoy más que pagada con eso, pero es un sacrificio mayor", afirmó.
Javiera Toro Ibarra es una agradecida de la vida y siempre está dispuesta a dar lo mejor. Se espera que esté en la nómina para ir a la Copa América en Colombia y así seguir construyendo su futuro al igual que sus coterráneos, Alexis Sánchez y Ascanio Cortés; y sus familiares.
"Si las cosas se ponen difíciles, que trabajen, que luchen, que crean en ellos, en ellas, y que todo lo que puedan imaginarse está ahí, solo hay que trabajar y perseverar, pero que crean siempre hasta el final, que sean felices realizándolo".
Javiera Toro Ibarra, con un mensaje para los niños y niñas