Cartas
Colaciones saludables
Señor director:
A pesar de la polémica, el regreso presencial a clases es una realidad con la que muchos padres, madres y cuidadores deberán lidiar. De todas las preocupaciones que esto acarrea, la alimentación ocupa un lugar importante, pues la gran mayoría de los menores deben comer en sus respectivos recintos.
Dentro de los tiempos de comida que se consumen en el horario escolar se encuentran las colaciones, definidas como alimentos ingeridos fuera de los tiempos principales, como desayuno, almuerzo, once y cena. Estas son necesarias cuando existen jornadas de más de cuatro horas sin ingerir alimentos.
Sin embargo, si las comidas principales fueron adecuadas en nutrientes y se consumen en intervalos menores a cuatro horas, no todos los niños tienen la obligación de una colación.
Si el menor consume alimentos en su jornada escolar, se debe promover la elección de alimentos saludables con bajo contenido calórico, pero de un alto aporte en nutrientes, siendo contrario a la tendencia actual de preferir alimentos procesados, altos en sodio, azúcares y grasas saturadas, lo que ha conducido a estados de malnutrición por exceso, propiciando el sobrepeso y la obesidad a edades tempranas.
La recomendación es escoger entre frutas, palitos de verduras, frutos secos sin sal, leche o yogur. Además, se sugiere complementar con agua en lugar de jugos y bebidas y variar la composición de la colación diariamente.
Tomar conciencia de nuestra alimentación y la de nuestros hijos es un pilar fundamental para lograr un óptimo desarrollo, una buena salud y estilos de vida que nos ayuden a corto, mediano y largo plazo.
Camila Cisternas
Cuidado
Estimado director:
Todo indicaría que la orden del día a nivel del planeta, es decir no a todo lo que venga y que tenga que ver con Rusia.
Cuidado, se acuerda usted del día del partido de Brasil-Chile, el de la bengala y el "cóndor" Rojas. Recién terminado dicho encuentro, con Rojas de víctima, todos fueron a protestar y atacar la embajada de Brasil y a cualquier transeúnte de color que aparecía, le daban con todo, y no era chiste, porque todos eran "supuestamente" brasileños.
Sin embargo, unos ciudadanos africanos que "turisteaban" por el sector se fueron de paliza, sin ni siquiera saber de la bengala y menos quién era el "cóndor" Rojas.
Luis Enrique Soler Milla