Cobreloa no levanta cabeza y se mantiene penúltimo en el torneo
El "Zorro" tiene la peor campaña histórica como local y puede ser colista si Barnechea gana hoy.
Deportes - La Estrella
El drama no es nuevo. Hinchas encarando a dirigentes y jugadores, futbolistas con la mirada perdida y evitando las entrevistas con diálogos del tipo "qué te voy a decir, si fuimos una vergüenza de nuevo". Cobreloa vive días complejos dentro de la cancha y los números son elocuentes. La peor campaña de la historia como local, con cinco derrotas en una misma temporada, penúltimo en la tabla con opción de ser nuevamente colista -si Barnechea derrota a Temuco como local hoy-, un castigo "por secretaría" por desconocimiento de las reglas y un plantel cuestionable, con jugadores que no logran darle soluciones al DT.
Esta vez, el "verdugo" fue Arturo Fernández Vial, quien no jugaba en Calama desde 1992 y no ganaba desde 1986. 35 años y un plantel hecho para pelear en segunda división no fueron excusa. Los aurinegros apelaron al "viejo libreto" de esperar con una línea de cuatro defensores más un quinto -Arturo Sanhueza, siempre ordenando a los suyos- y tratando de apelar a algún parado o un contraataque. Y con eso le bastó.
La prueba más indiscutible es que en la primera etapa, el golero sureño Gustavo Merino no tocó la pelota. Pese a que Cobreloa intentó, volcó la cancha y aprovechó que su rival, con más partidos y desgaste sucumbía por el intenso calor en el Zorros del Desierto.
Pero ni eso bastó. Un remate en el vertical de Nicolás Maturana y dos oportunidades desperdiciadas por un opaco Gabriel Tellas en inmejorable posición marcaron el acercamiento naranja al arco penquista.
Al frente, "el Almirante" tuvo una y aprovechó la repetitiva pasividad loína en las marcas cuando de aplicar "pizarra" en los balones detenidos. Todos mirando un tiro libre de Sanhueza que el zaguero Jeriberth Carrasco aprovechó para desviar y poner el 1 a 0 en los 28 minutos.
Sin reacción
Héctor Almandoz intentó darle volumen ofensivo con más delanteros. Atacaba con Carlos Ross, Nicolás Maturana, Ronald González, Leonardo Olivera y Fernando Barrientos. Y chocaba todo el tiempo contra el murallón "aurinegro". Sin ideas, con marcada confusión y desesperación.
A tanto llegó el descontrol que en una jugada intrascendente, Maximiliano Velazco salió a pelearle el balón a Gustavo Gotti en un cobro sancionado y de esa trifulca salió la expulsión de Axl Ríos por doble amarilla. Innecesario, irresponsable para el momento del club y una clara señal de que la tranquilidad no abunda en el grupo, por la posición en la tabla del Ascenso.
Ni con 10 jugadores por lado, tras la expulsión de Bastián Solano, los "Zorros" lograron marcar supremacía. Incluso, el forastero clavó una contra ante una defensa nuevamente mal parada y allí, Kevin Harbottle sentenció la derrota con un ajustado "globito" sobre un Velazco adelantado.
Ni el descuento de Carlos Ross cuando se jugaban cinco minutos de descuento vino a cambiar los semblantes. La rabia, la impotencia de los fanáticos en el estadio contrastaba con el silencio de los jugadores, quienes cada vez se ven más presionados y cerca del abismo.
Quedan nueve partidos para cambiar la historia. Pero lo cierto es que siendo Cobreloa, con su historia, su exigencia y su tradición, hoy la mochila por no descender parece cada día más pesada. Y si había margen de error en el papel, ese se acabó hace rato.