Cuando se pide hablar con el dueño, se nota...

Estimado Director:

¿Qué me diría usted, si al llamar por teléfono a una empresa (local comercial), le contestara el dueño de la empresa en persona, ya sea para reclamar por un producto, para instrucciones de uso, etcétera, o sea nada de contestadoras virtuales, o voces caribeñas, lejanas de nuestra idiosincrasia, o largos minutos eligiendo opciones, marque 1 si es vegano, 2 si es parrillero, o eternas cortinas musicales, qué me diría usted?.

Una de las primeras personas que ocupó esta metodología, para atender a sus clientes, fue nada más y nada menos que Steve Jobs, cofundador y presidente ejecutivo de la empresa Apple y en Chile también lo hizo, el dueño de las tiendas "Casa & Ideas".

Imagínese que todas sus dudas, le sean resueltas por el mismísimo dueño de la empresa, sin lugar a ninguna duda, la calidad, el servicio, la post venta, etcétera, de muchas empresas mejoraría notablemente, una para que no lleguen a molestar al mandamás tan seguido y la mejor de todas, aumentar las ventas, a su vez, las empresas que sigan con la típica "cantaleta", de marque 1 si anda en bicicleta, 2 en skate,... NEXT...

Experiencia personal

"Cuando se pide hablar con el dueño, se nota..."

Me ocurrió hace un tiempo, tuve varios problemas con una secadora que compré, después de varias visitas de la máquina al servicio técnico, de visitas de técnicos a domicilio, e incontables e improductivas llamadas telefónicas, un día me agoté, agarre la maquina y me fui directamente a la oficina central de la marca en Santiago, y le pedí a la secretaria que quería ser recibido por (le nombré al dueño de la empresa japonesa), se extrañó, me dijo que estaba en Japón, en vista de mi existencia, me atendió el gerente de la marca en Chile, cuento corto, entro en su oficina, coloco la mismísima secadora en su escritorio, sumado a mi empecinamiento de hablar con el dueño japonés, tuve una respuesta como yo quería y me merecía, como dato, en el transcurso de la conversación, le dije que si no me solucionaba el problema, iba a enviar la secadora a Japón, a nombre del dueño de la empresa y con flete por pagar, eso fue lo que hizo que todo se solucionara positivamente para mí...

Tiempo después, solucionado el problema, el mismo gerente, me preguntó, si de verdad habría enviado la secadora a Japón, si no me hubiera solucionado el impasse, yo le dije que sí, y me dijo que eso, en términos simples, les habría significado perder inmediatamente la representación en Chile...

"Cuando se pide hablar (ó se habla) con el dueño, se nota..."

Luis Enrique Soler Milla