La certera labor de la Unidad Coronaria en lo más crítico de la pandemia
Fue la primera área del Hospital Regional que reconvirtió sus camas a críticas para ayudar a descongestionar la UCI, la que en junio y julio no paraba de ingresar los pacientes más complejos que luchaban contra el Covid-19. Así recuerda el equipo de salud los peores días.
Cuando en junio y parte de julio la positividad por el coronavirus en la región superaba el 30%, en las distintas unidades de la red de salud se vivían horas críticas. El escenario era una verdadera carrera contra el tiempo que, a medida que llegaba una alta demanda de pacientes, se centró en una constante habilitación de camas para dar abasto, utilizando también de otras áreas para apoyar el trabajo en UTI y en UCI.
Es imborrable el recuerdo que en el 2 de julio la red de salud regional contaba 97 pacientes en UCI luchando contra el Covid-19, el número más alto que se ha registrado en la zona. Ayer esa cifra era de 14.
En mayor o en menor impacto, lo cierto es que la la pandemia más grande del último siglo afectó a todas las áreas clínicas. Una de ellas fue la Unidad Coronaria del Hospital Regional de Antofagasta (HRA), de la cual tuvo que reconvertir 15 de sus camas a críticas, para así ayudar en la descongestión de la UCI de Adultos.
Esos fueron los momentos más duros de la pandemia , lo cual recuerda Zoujair Salmen, médico residente de la Unidad Coronaria (pacientes cardíacos) del HRA:
"El reto no solamente fue la rutina de pacientes cardiovasculares, el reto fue ver otro tipo de pacientes que comúnmente frecuentan en la unidad de cuidados críticos, infecciones de otros órganos, fallas de múltiples órganos, en lo cual todo el equipo trabajamos como siempre, con la mística, la lógica, el sentido común y el profesionalismo que nos caracterizaba".
"Nos llegaban muchos casos con las complicaciones cardiovasculares asociados al Covid-19, lo que le hacía un plus en el manejo. De hecho, hemos manejado casos que nos ha permitido a nosotros abrir mucho más las expectativas de cuidados críticos coronarios y cuando se asociaban a Covid. Eran muy severos... casos muy graves", añade el especialista.
Parte importante del equipo es Karen Adaros, enfermera de rehabilitación cardiaca, quien reflexiona sobre cómo enfrentaron estos duros momentos:
"Pasamos de un turno de 12 a uno de 24 horas. Eso fue un reto para todos los funcionarios, porque fue una exigencia elevada... había turnos en que no se podía dormir y usted se imagina una persona 24 horas en una unidad crítica sin poder descansar".
Agrega que "es un trabajo en equipo sumamente especializado en cuanto a los médicos, enfermeras, paramédicos, auxiliares, a enfrentar esta pandemia de distintos puntos de vista. Primero de la patología, del conocimiento, hasta los miedos de los funcionarios a un virus que era tan desconocido en su momento. Además, como Unidad Caradiovascular nos tocó enfrentarnos a abrir camas críticas en otro lado, abrimos hasta 15 en una unidad nueva. Tuvimos que liderar esas camas para descongestionar lo que era la UCI Adulto para que ellos recibieran los pacientes Covid y nosotros los no Covid".
La profesional cuenta que esa fue la primera apertura de camas críticas, logrando un gran trabajo en equipo con el personal de la UCI Coronaria y que fue clave en la recepción de pacientes.
Miriam Ortiz, TENS de la UCI Coronaria añade que "se nos presentaron casos que nosotros nunca habíamos visto y que tenían que ver con el Covid y nos llevó a responsabilizarnos con turnos que nos cambiaron radicalmente la vida personal".
"(Hubo) bastante tensión, a veces angustia porque tuvimos que dejar más distante a nuestras familias de lo que estábamos acostumbrados y fue el compromiso de todos nosotros, del equipo en general y con el compromiso con el hospital", agrega.
Olga Ferrada, kinesióloga de la UCI Coronaria, dice que el reconocimiento es al "trabajo en equipo para poder apoyarnos en la parte psicológica, en el ánimo, porque los tiempos no fueron buenos en la presión. Trabajábamos turnos en los que a veces no podíamos dormir, ni siquiera descansar y en ese sentido fue la segunda familia que yo tuve. El tener el apoyo de mis compañeros, de médicos, paramédicos, auxiliares, de todos, para poder lograr el objetivo que teníamos con los pacientes".
"Se presentaron casos que nunca habíamos visto y tenían que ver con Covid. Tuvimos que responsabilizarnos con turnos que nos cambiaron radicalmente la vida"
Miriam Ortiz, TENS de la UCI Coronaria