Rodrigo Tapia Jara
Quizas ya los ha visto por ahí en alguna esquina de la ciudad bailando y mostrando sus destrezas rítmicas al público tocopillano, se trata de Anderson Bangera Gamboa y Andrés Riasco Candelo, dos jóvenes colombianos con un sueño por cumplir.
Desde hace menos de dos semanas que Anderson y Andrés, están bailando por la ciudad en cada esquina y sector donde los quieran ver mostrar su show, rutina que ya realizaban juntos en su natal Cali.
En esa ciudad, se dedicaban al trabajo social apoyando a la Cruz Roja en sectores con altos índices de vulnerabilidad social, donde a través del baile le enseñaban a los niños de esos lugares alternativas ajenas a la violencia, comentan este par de amigos.
Muchas veces, recuerdan, organizaban veladas en la calle donde juntaban a barrios contrarios (que entre ellos habían rencillas entre pandillas) y a través del arte tenían una tregua, donde los vecinos podían conversar, conocerse y reunirse en torno el baile, el canto y la música.
Talleres de baile
Hace unos días tuvieron la oportunidad de ser invitados por Miguel Chepillo de la Casa de la Cultura Hugo Vidal Zamorano del Municipio local a dictar unas clases de baile.
Estas se realizarán en el mismo edificio cultural donde los interesados tendrán la oportunidad a contar de este sábado tres de junio desde las once horas en adelante, para aprender los ritmos urbanos, como bachata, salsa choque, merengue, salsa y cumbia.
La idea es poder montar una academia de baile en la ciudad para darles clases a los niños, jóvenes, adultos y a todos los interesados en aprender indicaron los bailarines.
Por su parte Chepillo, señaló que "una forma de integrar a todas los extranjeros que han llegado a Tocopilla es poder darles un espacio, ellos me han manifestado que quieren abrir una escuela de baile urbano, por lo tanto nosotros tenemos que recoger esas inquietudes y podemos apoyarlos a ellos con nuestros espacios, la difusión, convocatoria, y esto es una manera que está dentro de las políticas de integración de nuestro país y de la comuna".
A lo que agregó que no solamente con ellos van a trabajar, sino que también con cualquier extranjeros que esté dando un aporte comercial, social y cultural en beneficio de la comuna.
Cali es la ciudad de Colombia de donde son oriundos estos dos amigos que llegaron repletos de sueños al país.
Veinte días en el país, tiene Anderson quien junto a su amigo quieren enseñar a bailar.